Situación: El niño es llevado a una sala en la que no hay nada más que una silla y una mesa sobre la que hay un plato con un malvavisco (nube o esponja como siempre lo he conocido). La persona que lo acompaña, antes de dejarlo solo durante un corto espacio de tiempo, le ofrece: 1. Se puede comer el malvavisco inmediatamente. 2. Se puede esperar hasta que regrese con un segundo malvavisco, que podrá comerse junto al primero si este permanece intacto.
Pregunta: ¿Puede el deseo del niño por un segundo malvavisco resistir la tentación?
Delicioso y por momentos un tanto agónico vídeo.
(Vía Nerdcore & Feingut & The Daily What & Have you seen this?)
¿Que es esto? ¿Microsiervos Reload? ¿Refogonazos? ¿Donde están tus artículos? Me voy 4 meses sin nada que enchufarle al ordenador y cuando lo enchufo de nuevo me encuentro con esto, que es mas de lo mismo, que es lo que te encuentras en todas partes. ¿Que ha sido de esas epístolas que no dejaban indiferente a nadie?
ResponderEliminarPedazo comentario para ser anónimo, una pena. Un saludo.
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